En este segunda entrega, Fede Rodríguez relata «Algunas verdades sobre el Caleuche», un artículo publicado originalmente por Rosario Rangel, autor de “El origen del viento”, en Revista Caleuche nro. 5 / Junio 2017.
Conocé un poco más de esa sombría y extraña embarcación que navega las aguas del sur con siniestros objetivos.
Imagen: Portada revista Caleuche – Omar Hirsig
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EL PODCAST
El Caleuche es una embarcación fantasma que se arrastra por los mares del sur de América, dedicada al contrabando de mercaderías y almas. Tiene un aspecto imponente de gran barco antiguo, lleno de luces brillantes, y siempre está acompañado por música de fiesta.
Cuando ocurre un naufragio, los marineros tiemblan si empiezan a escuchar risas, porque el Caleuche rapta los espíritus de aquellos que se ahogan en el mar.
La mayoría de las personas que lo han visto desde la costa quedaron idiotas.
Está comandado por brujos que caminan por cubierta envueltos en pieles de carnero, llevando en el pecho un crucifijo de madera negra. Todos sus tripulantes tienen fríos ojos de pescado y no recuerdan nada de su vida anterior.
Cuando esta embarcación quiere pasar desapercibida puede navegar bajo el agua o esconderse en una densa capa de niebla que ella misma produce.
Además, realiza pactos en tierra firme: a cambio de proveerlo de mercaderías y oro, se queda con el alma del comerciante —que será tomada en el momento de su muerte—, o este le entrega un hijo pequeño para que los brujos lo críen como parte de la tripulación.
Algunas noches, cuando el mar está bravo, el Caleuche llega a un puerto y esparce una niebla verdosa que se mete en la cama de las vírgenes para hacerles porquerías. Los hijos de esta unión nacen monstruos.
En el Museo Marítimo de Ushuaia, en una botella de antiguo licor, un preso construyó, hace muchos años, un modelo a escala del barco fantasma. Una vez por año la llenan de pisco para que los brujos no se inquieten.
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